Esta novela de la autora francesa Maud Lethielleux fue un regalo para mi cumpleaños. Al principio no me enganchó para nada y no me gustaba pero al final hubo fragmentos que hasta lloré (sí, soy una blandenga).
La protagonista es Moon, una chica de 19 años que vive en la calle desde hace 3 años. Moon vive vendiendo sus sonrisas a los transeúntes que pasan por la plaza Saint-Mich y la avenida Víctor Hugo agobiados por su vida cotidiana (siempre con pisa para ir a trabajar). Es una chica con una gran imaginación y su mayor pasión es la escritura.
No se trata de una novela donde todo es felicidad y no hay ningún problema. Todo al contrario, la autora nos muestra la crudeza de la vida en la calle a través de Moon y las diferentes personas que se cruzan en su vida.
Sinopsis
La historia de Moon, una joven que vive en la calle vendiendo sonrisas y que encuentra su mayor evasión en la escritura.
Moon tiene la cara tan redonda y
blanca como la luna, y sus cabellos del color de la noche envuelven su
expresión de niña. Con diecinueve años ya lleva tres durmiendo en la
calle, cerca de un puesto de flores, porque Moon ha elegido ser libre y
que su imaginación vuele con la escritura, su mayor pasión. Moon se gana
la vida obsequiando con un instante de fugaz felicidad a los
transeúntes a cambio de unas monedas: ofrece sonrisas, tímidas o de
oreja a oreja, disimuladas o burlonas, pero raramente forzadas. Entre la
plaza Saint-Mich y la avenida Víctor Hugo todos la conocen como «la
pequeña vendedora de sonrisas». Una narración inolvidable llena de
emoción, originalidad y frescura sobre el poder de la imaginación y la
magia salvadora de las palabras.
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